Gran Reserva de Rioja
En nuestro panorama de etiquetas infalibles se encuentra sin duda el Remelluri. Uno de los bastiones de La Rioja, fue una de las primeras bodegas que comenzó a vinificar exclusivamente uvas de su propiedad, y el gran trabajo y mimo al que se une la reincorporación de Telmo a la casa familiar, hoy configura una identidad y un terruño característicos. Este Gran Reserva combina tempranillo, garnacha, graciano y algún pequeño aporte de uva blanca, y es un vino de medio cuerpo con estructura muy elegante y un final que parece eterno. Color cereza, limpio y brillante, de muy buena intensidad, logra el equilibrio aromático entre los recuerdos de monte bajo, la fruta roja, los cueros y balsámicos. Boca muy suave con buena acidez, redondo, muy definido y esencialmente persistente. Una gozada.
La renovación de La Rioja
Aurus 2006 es el gran vino de guarda de Miguel Ángel de Gregorio elaborado con uva de la riojana Briones. Infatigable viticultor, uno de los primeros en apostar por los vinos de pago y las variedades autóctonas, ha conseguido con este vino tremendo acallar bocas y conciliar el aplauso del público. Explota cromáticamente en rojo púrpura intenso y sus aromas, ¡qué aromas!, son tan potentes, legantes y complejos que nos impactan desde el primer momento: buenas notas minerales, fruta compotada, mentolados, monte bajo, cacao… Y se bebe de manera armónica, con taninos dulces, muy sabroso e igualmente complejo para el paso de boca: toques
de pasa, regaliz, café, hierbas aromáticas… Largo, persistente, rotundo; uno de nuestros embajadores.
Qué gran casa Muga
Esta saga bodeguera de primer nivel, bodega generosa con la tradición como pocas y apasionada de los últimos avances, se llama Muga. El vino corre por sus venas desde 1932. Haro, Barrio de la Estación, es un hermoso caserón donde se van sucediendo los vinos como las generaciones. Aro 2006 es el top de esta bodega. Surge de viñedos muy viejos de Tempranillo y Graciano. Se expresa con un aristocrático color cereza brillante y en sus aromas apreciamos un compendio de buena
fruta madura, toques especiados y dulces, roble cremoso y seductor fondo mineral. Se bebe, como todo de lo Muga, muy bien, acaso mucho más profundo, pues lo frutal y lo tostado es maduro, potente, carnoso. Un vino que enamora de impacto, de larga vida y de espléndida memoria.
Un gran blanco de Rioja
Si hablamos de grandes vinos de este viejo país llamado España, tenemos que citar un blanco riojano y una casa aristocrática como López de Heredia. Aunque fue clasificada muy buena la añada 1996, quedó ensombrecida por las extraordinarias precedentes, pero pasado el tiempo la calidad de esa vendimia se expresa seductora para el bebedor. Blanco elaborado a partir de la viura preferentemente, se expresa con ámbar natural muy desarrollado, nariz fina y complejísima que a pesar de su desarrollo nos sigue recordando a la fruta. Los blancos de Tondonia son mucho más que un clásico y su suavidad en boca, consistencia, finura y amplio desarrollo nos transportan en el tiempo y con el sosiego del viñedo antiguo.
La Nieta arrebatadora
¡Cómo me gustan Laguardia y los vinos amplios y aterciopelados! La Nieta es un tempranillo de altísima escuela proveniente de una finca con características especiales. Fermentación en tinas de madera, buen roble y un vino inolvidable: rojo oscuro profundo, brillante y amoratado, y una lágrima que se derrama y tinta la copa. Vino de gran intensidad, complejidad perturbadora y buena fruta negra. Elegantes tostados, lácteos y un buen fondo que nos encanta: balsámico y mineral, y, como todos los grandes vinos, a medida que se abre gana en intensidad. Vino largo, como una vida intensa, vino de todas las estaciones, persistente en la memoria y una presencia siempre mineral que nos hace recordar uno de los mejores terruños del mundo para el vino.
Expresiva elegancia
El Pisón, uno de los grandes, y no es un recurso. Amar el vino y no tener la dicha de beber Viña El Pisón es una desdicha, porque hay pocos vinos tan afinados, tan expresivos, tan clásicos y tan hechos como éste. Irradia el saber hacer de muchas familias anteriores y mantiene vivo el espíritu de un viñedo. Sutileza mineral, delicadas especias y taninos acariciantes. Tan fino de nariz como potente en boca. Tan sugerente en su crianza, con notas de café o cajas de puros, recuerdos mentolados y fruta compotada, como un beber corpulento, estructurado y vivo. Vino con poder, con longitud, con recorrido narrativo. Un vino de guarda, donde las frutas, tanto rojas como negras, explotan como la sorpresa del amor. Un ejemplar que nos reconcilia con las sensaciones del vino.
El exclusivo de Vargas
Marqués de Vargas es una de esas bodegas riojanas de solera y clasicismo que están en Rioja. Precisamente por esto, y por la fidelidad al tempranillo y al viñedo, resulta siempre reconfortante beberse su ejemplar más selecto. Vino de pago envejecido en roble ruso, se trata de una apuesta muy seria y firme, de impecable expresión, hasta llegar a la complejidad y a la inteligencia. Así, el clásico cereza-picota madura da paso a perturbadores y muy finos aromas, y una nariz de alta escuela. Su paso de boca es muy armado, muy cálido y con la gula que compone la acidez y la redondez, que aporta su crianza en roble. La noble reducción, el recuerdo de naranja confitada, y el espléndido recuerdo de su sabor.
PUESTO EN EL RANKING: 18
BODEGAS: Marqués de Vargas
D.O: CA Rioja
NOMBRE: Reserva
Privada 2005
PRECIO: 40 euros
WEB: www.marquesdevargas.com
Con 93 puntos podemos beber en confianza un depadre 2009
Josh Raynolds ha dado una valoración muy importante a nivel internacional al vino tinto de rioja de Bodegas San Prudencio depadre 2009. Josh Raynold crítico de nivel mundial del International Wine Cellarda da una puntuación de 93 puntos que podemos considerara sobrasaliente para este vino depadre 2009. En la ficha técnica de la cata el periodista destaca lo siguiente:
El Vino Conclave Esencia de bodegas San Prudencio en alza
Esta bodega integrada al Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada de Vinos de Rioja, posee viñedos (entre 5 y 105 años) a 800 metros de altitud en la rioja alta y alavesa.